miércoles, junio 10, 2009

De Ser Un Buen Perdedor

Existen tres posibles resultados en un encuentro: Un triunfo, un empate o una derrota, bueno, en la mayoría de los deportes, ya que en varios, como el que venimos practicando últimamente, siempre habrá un vencedor y un vencido, y como en toda competencia unas veces ganamos y las otras perdemos, eso no es novedad, lo que realmente se debe considerar es la manera como se encaran esas victorias o derrotas.

A nadie le gusta perder, eso es un hecho, pero es inevitable, no existe nadie invencible, pero lo que le da valor al jugador también como persona es la manera en que afronta esa derrota y también las sucesivas, aprender a perder es todo un arte independientemente de si sirva de consuelo el creer que se gana un poco o por el contrario se pierda todo.

No todas las derrotas son iguales, a veces somos masacrados sin derecho a chistar y otras veces se sufre demasiado al estar acariciando la victoria para verla irse en manos del otro, en otras ocasiones el rival simplemente es mejor que nosotros y el resultado el lógico, pero de todas maneras, sea cual sea el motivo perder nunca es agradable, por muy maduros que seamos siempre queremos derrotar a nuestro contrincante así sea jugando piedra papel y tijera.

Pero si hay algo peor que un mal perdedor es un mal ganador, ese que se regodea de la victoria y minimiza el esfuerzo del rival, el que magnifica sus movimientos y convierte al perdedor en un mal perdedor, el que nunca tiene la suerte de su lado porque todo en él es experiencia y preparación, el que se llena la geta cada vez que hay que recordar un recuerdo y solo existe su versión del encuentro, ese al que siempre le queremos ganar.

Generalmente el mal ganador es pésimo perdedor, el día que pierde simplemente no había dormido bien, estaba pensando en otra cosa o fue superado por la montonera, para él no hay calidad en el rival y sus chispazos nunca se volverán a repetir; el mal ganador convierte el deporte en una batalla donde lo importante es hacerle comer sus palabras y demostrarle que grandeza también se encuentra al perder con estilo.

lunes, junio 08, 2009

De Alcanzar la Gloria

En un fin de semana tortuoso donde la selección perdía mientras todos los demás visitantes ganaban, jugando con once defensas y ningún atacante, la única esperanza que me quedaba era ver a Federer ganar el último Grand Slam que le faltaba, aunque era obvio que la ansiedad haría mella en él no se podían perder la fé cuando todo estaba a su favor en el papel: Y no defraudó, ganó.

La última bola en la red lo arrodilló entre lágrimas y le permitió acariciar esa gloria tan esquiva que parece acaramelarse cada vez más con Nadal, pero ya no importaban las anteriores derrotas, solo el presente triunfo, seguir escribiendo su nombre en la historia y con mucho tiempo y espacio para caminar lo que nadie ha recorrido.

No me imagino lo que se sentirá acariciar la gloria con las manos, y no me refiero a la gloria instantánea que todos disfrutamos, hablo acerca de ser el mejor del mundo en lo que se hace, en el reconocimiento global, más aún en ser nombrado el mejor de la historia, esas son cosas que no se consiguen a diario y que no están para todo el mundo.

Evidentemente la historia no se termina de escribir aquí, en el futuro vendrán muchos más jugadores y también romperán todos los récords que él imponga, pero es difícil encontrar a alguien con un carisma tan especial, que genere tanto aprecio entre los aficionados y encima tenga un juego que nos haga vibrar. Hace ya varios años que Michael Jordan se retiró y la NBA aún no consigue un sucesor a su trono, más allá de los títulos el deporte siempre busca una persona que nos maraville en todos los aspectos de la vida.

Por si se preguntan me encanta el tennis, aunque nunca haya tenido una raqueta entre mis manos, pero siento el triunfo como mío, así como siento propias las derrotas de la selección... Agridulce.

viernes, junio 05, 2009

Del Nuevo Miembro de la Familia

Dicen que tiene ocho meses pero que crece hasta los tres años, aunque para mi ya tiene como quince porque tiene el cuerpo, los dientes y los garfios de un adulto; maulló un rato durante la noche, me imagino que extrañado por el panorama, lo triste es que lo hace tal como un bebé y simplemente no se puede ignorar, se llama Percival, como el caballero de la mesa redonda, pero para mi simplemente es Gatitoooo!!!!

En mi familia hemos estado acompañados casi todo el tiempo por mascotas, la mayoría perros, pero a mi hermana menor le gustan los gatos y pues últimamente vivimos con una pareja de cada especie. Por ella pasamos a tener gatos comunes y silvestres que, algunos, murieron envenenados por los agradables vecinos y otros simplemente respondieron al llamado de la naturaleza.

Ese ciclo se había cerrado con un gato persa blanco de ojos naranja que era amo y señor de la casa, excepto cuando el perro lo jodía y el felino optaba por alejarse de su algarabía y con desdén lo oteaba vanagloriándose por sus cualidades. El pobre murió asistido porque una extraña enfermedad lo dejó sin pelo y le atormentaba la existencia, o por lo menos eso me dijeron porque desde hace mucho tiempo no presencio la partida de los animales que nos acompañan.

Ahora de nuevo le abrimos espacio a un compañero, espero pronto tener fotografías para que lo conozcan y si se preguntan por qué lo promociono aquí, cosa que nunca hice con la perra, pues la respuesta es muy simple: Me gustan los gatos porque cuando necesitan afecta vienen y lo toman, en cambio los perros se sienten mal si uno no concentra su atención en ellos, como las personas.

lunes, junio 01, 2009

De Ando Ganas

Una canción que vi en una telenovela y me llamó la atención. Ando Ganas de Los Piojos, argentinos.




Letra de la canción
Ando ganas (Llora llora)
Intérprete: Los Piojos


Ando ganas de encontrarte
cuánto lejos que estás acá
ando ganas de encontrarte
ando lejos, más no me da
llora, llora, llora mi pena de amor
llora, llora, llora mi pena por vos
llora, llora, llora mi pena de amor
y amale.

A mi sí que me gustan tus piernas mecerse
como si fueran olas
por lo que se ve
me gustó tu mar y tu
canoa.

Ando ganas de encontrarte
de una buena vez por todas
el invierno largo se fue
y ya cambiaron las modas
llora, llora, llora mi pena de amor
llora, llora, llora mi pena por vos
llora, llora, llora mi pena de amor
y amale.

A mi sí que me gustan tus piernas mecerse
como si fueran olas
por lo que se ve
me gustó tu mar y tu
canoa.

Solo una cosa te digo
yo necesito un abrigo
que en esta tierra hace frío
si no estás al lado mío
y como vos no hay ninguna
no brilla tanto la luna
ando gana de encontrarte
quiero llevarte pa'marte.