De Un Acto Bochornoso

Todos hemos pasado vergüenzas en la vida, de eso estoy seguro, no creo que nadie sea la excepción, el que esté libre de pecado que tire la primera piedra, los motivos son variados: Los celos, la ira, el síndrome premestrual, el alcohol, el odio, el nacionalismo y de paso el autoritarismo, la envida, en fin, cada quien sabrá cómo y por qué hizo lo que hizo.

La gravedad del hecho se mide bajo la vara del ejecutor, para algunos ciertas cosas no son tan preocupantes como para otros, pero mientras en la conciencia haya algún rastro de vergüenza pues son cosas para no recordar, además hay que considerar los agentes externos involucrados en el suceso y para ellos, como solo son testigos cualquier acontecimiento que altere la normalidad es digno de rememorar, más si tiene un dejo de horror.

La cuestión es que ya con el ojo afuera no hay Santa Lucía que valga, después de haber dicho o hecho algo no hay manera de borrarlo, el tiempo no se puede devolver y cuando necesitamos que la tierra se abra y nos trague generalmente no pasa. Cuando se ha dejado la dignidad en el piso no queda más que levantarla y seguir, continuar como si nada hubiera pasado, o mejor, reflexionar acerca del hecho para evitar esos comportamientos y seguir con la vergüenza envuelta en la sombra alejándose lo más que se pueda del sol.

De Code 46

Estas vacaciones forzadas fueron de muchas, muchas, muuuuuchaaaaasss películas; buenas, malas, no tan malas, comedias, de acción, documentales, de cartelera, podría hacer un post por cada buena cinta que me vi, que fueron muchas, pero hoy hablo de la última de mi temporada, una que encontré por casualidad haciendo zapping y me llamó la atención.

Se llama Code 46, protagonizada por Tim Robbins, el mismo de Mystic River, y por Samantha Morton que es la misma que hace del precog en Minority Report. En fin, eso por si se la encuentran algún día tengan una referencia y se detengan y aprecien el film que realmente vale la pena.

La cinta es algo futurista, pero un futuro no tan espacial, mezclan palabras en varios idiomas, fecundaciones in vitro, una sociedad dentro la ley y otra completamente por fuera de una frontera física, borran recuerdos y están sometidos a la estricta vigilancia del gobierno o algo parecido, si se está dentro de la frontera no existe una manera de evadir el ojo de dios.

Lo curioso es que el personaje principal no es más que un tipo que utiliza su intuición para trabajar, es como una especie de psíquico que puede leer la mente de los demás y pues se esperaría que con tanta tecnología no fuera necesario recurrir a estas cosas pero su trabajo es atrapar ciertos criminales, me pareció extraño.

La cuestión es que motiva a una persona en su posición a proteger a una bandida, a violar toda la ley sabiendo que no puede lograrlo, a vivir intensamente así sea solo por un segundo, tal vez eso, el vivir intensamente por un instante, el salir de ese caparazón que nos retiene y simplemente ser lo que queremos ser, no sé.

Interesante el concepto de unos virus para modificar el comportamiento, el virus de la empatía que nos permitiría ser agradables con las personas, o el virus para evitar infringir la ley y aún así si logramos hacerlo inculparnos y esperar para ser aprendidos. Algunas veces las entidades tienen motivos para hacer ciertas cosas, pero sería mejor si nos enteráramos de esos motivos, eso nos abstendría de actuar.

De Dormir Despierto

Cuando era niño, yo vivía con mis padres en un pueblo de mediano tamaño, mientras mi abuela materna vivía en un pueblo mucho más pequeño que debe quedar como a una hora de distancia. El hecho es que generalmente ella nos visitaba seguido para hacer sus vueltas, comprar cosas, ir al médico, vainas de ese estilo, y siempre llegaba en el primer "vuelo" y se iba mediada la tarde.

Ese primer "vuelo" que en la década de los 80 y 90's era un bus escalera o chiva o como la conozcan, generalmente hacía que ella llegara a eso de las 7 a.m. a mi casa, hora en la cual éste bebé seguía rendido en los brazos de Morfeo, pero generalmente mi mamá todavía estaba en la casa entonces trataban de actualizarse de chismes lo más rápido posible, tomando como base de operaciones la cocina y hablando sin parar.

Era ahí, entre sueños, entre dormido y despierto, que las voces se filtraban en mi cabeza para atormentar mi descanso, ya nada podía seguir igual y no me quedaba más remedio que levantarme para saludar, para revisar lo que traía que religiosamente tenía un componente de harina, podría ser torta, o pan de maíz, o unas galletas recubiertas de azúcar, o pudines, o miles de cosas deliciosas.

Hoy lamentablemente ella no está, y ya no va a estar más, pero tuve esa misma sensación en mi cabeza, y la misma reacción natural, y los deseos de recordar con ella estas cosas que hoy recuerdo para ustedes.

Del Baile de Despedida

Nos reunimos para la despedida de Jhon Fredy que regresaba a Chile y también para celebrar el cumpleaños de Christian que cada día ve más cerca los 30. El sitio no es uno de mis preferidos, no porque sea malo sino porque siempre nos vamos de pérdidas ahí, muy buena salsa para bailar pero terminamos haciendo lo mismo que en cualquier chuzo, o por lo menos yo, total, se presentaba César Mora y su orquesta María Canela y pues valía la pena intentar.

Siempre son muchos los llamados y pocos los elegidos, por eso estuvimos los de siempre, los que queríamos estar, el resto tendrá sus razones que no vienen al caso. ¿De qué se perdieron? Realmente la orquesta es muy buena, sus canciones y los covers que hacen son excelentes, fue una agradable sorpresa, me gustó la niña que tocaba el trombón, tal vez por ser la única mujer o tal vez por su manera de manejar el instrumento, no lo sé.

Para resaltar encontrarme cara a cara con la niña de la novela que les había comentado, reitero lo dicho, se ve igualita en persona, el mismo rostro y las mismas tetas, eso sí, tiene más trasero una gato erizado que ella, pero ni modo, estaba con el rasta ese que presenta no sé que cosas y otra gente de su novela pero me miró un instante de pies a cabeza y eso estuvo bien. También la amiga de Jhon fue un highlight, barro que el pendejo ese no la atendiera como es debido por andar pendiente de una jirafa recién conocida en el chuzo.

Y eso mismo también fue otro lunar, al final, por irse con la jirafa no apareció nunca en el apartamento de Christian y entonces no nos pudimos despedir, para reivindicarse de ese hecho tendría que hacer que la amiga me llamara, vamos a ver cómo gestiona eso. Balance positivo para jornada, ojalá lo que creo que pasó en el apartamento solo sea algo de histeria mía y nada de cierto, tenía que correr un riesgo pero valió la pena, ojalá las consecuencias sean mucho más satisfactorias.

De To Ride a Bike

Medio ebrio medio prendo, más lo uno que lo otro, medio preguntándome qué estoy haciendo y las consecuencias de mis actos, rogando a Dios por llegar sano y salvo a mi destino, tratando de tomar todo con la mayor calma posible, evitando un accidente con consecuencias catastróficas y pensando en redactar este post mientras maniobro por el centro montado sobre una bicicleta.

No era ni la Casa Rosada ni el Palacio de la Moneda, era el mismísimo Palacio de Nariño, el Archivo Distrital, la Luis Angel y yo tratando de aparentar mi estado de gravidez; nunca me imaginé que haría este recorrido conduciendo la bicicleta de mi mejor amigo, hacía no sé cuántos años no visitaba el centro y estar ahí, así como lo estuve es digno de narrar.

Entre todo el viaje no fue malo, bastante largo por la distancia que había que recorrer y además que no estaba como para acelerar mucho, solo me caí una vez y eso por dármelas de artista, me duelen las posaderas eso sí de tanto estar en esa posición, considerando que hacía como diez años que no andaba en bicicleta pues el balance solo puede ser positivo.

Definitivamente Dios cuida a sus borrachos, no es la primera vez que lo compruebo pero si espero que nunca deje de pasar, definitivamente la vida es para vivirla, tomé una decisión que desde el principio sabía no era la correcta así que solo me visualizaba en mi meta como quería estar, también las cosas que iba a escribir aquí y las ciclovías de los domingos que voy a conocer.

De Shake Hands with the Devil

Hace exactamente 15 años, mientras nos preparábamos para el mundial con una Colombia clasificada, en otro lugar de la tierra, uno lejano y distante, un genocidio se cometía por vaya a saber uno que razones.

Hoy 15 años después se vuelve a comentar el tema de una manera tibia, se supone que no debemos olvidar pero realmente lo que tratamos de haces es ocultar, imaginar que no pasó, que miles de personas no murieron y que todo hace parte de un capítulo que nadie escribió.

Shake Hands with the Devil es una película basada en el libro homónimo de un protagonista del conflicto, el general Romeo Dallaire quien era comandante de las fuerzas de la ONU en Rwanda; teniendo en cuenta éste concepto creo que la cinta es mucho más real y menos dramática de lo que fue Hotel Rwanda, pero no por eso deja de ser desgarradora, es más, creo que aporta más como documento histórico que cualquier otra adaptación.

Aquí se refleja más la desesperación y la impotencia de un hombre por hacer lo correcto, por salvar las vidas de miles de desconocidos simplemente por ser sus semejantes, mientras, como todo en el mundo, las entidades que pueden y deben hacer algo realizan todas las maniobras posibles para ignorar o minimizar la situación.

Interesante ciertos momentos del film, las cabras, el encuentro con el tipo de las cananas, los cuerpos bajo el puente, éste tipo de cosas podrían ser o no ciertas, pero en medio del conflicto todo el posible.

De la Visita de un Amigo

No puedo decir que sea el regreso, ni la llegada, ni una bienvenida, es lo que es: Una visita. Llegó Jhon de Chile por unos días, a ver a su familia y también a sus amigos, pero sólo está de pasó; de las primeras cosas que le pregunté era que si el próximo viaje sería el del regreso y no pudo responder con claridad, por eso, ésto solo es su primera visita.

Pues el reencuentro fue muy bonito, todo salió de maravilla y las expresiones de alegría desfilaron todo el día, en su casa nadie sabía y fue una grata sorpresa, algo dramática para mi pero al fin y al cabo el que llegaba era él y pues las cosas debían hacerse a su manera.

Luego de más de un año de no verlo, ellos saben bien la cantidad de tiempo porque hasta con días lo cuentan, se le nota algo cambiado, un poco más maduro, no mucho, pero sí algo, evidentemente éste tipo de viajes cambian a los caminantes, más a él que le hacía falta separarse un poco de su familia y ver el mundo real desde otra perspectivo, eso siempre es bueno para valorar lo mucho que se tiene.

Espero que los días aquí sean los suficientes para actualizarse de todo, de las personas, de los lugares, de los recuerdos, me imagino que todos queremos tenerlo cerca todo el tiempo pero antes que nada está su familia y ellos tienen el máximo derecho, yo hice lo que pude al momento de su llegada y si por razones de trabajo no logro despedirme esperaré que las personas que pudieron acompañarlo me pongan al día de todo lo que hicieron.

De la Involución

Inicio la semana enterándome que la compañía va a regalar unos cursos con certificación internacional incluída y estoy por fuera del listado de los elegidos, quedé como la guayabera: Por fuera y de colores. Me incomoda el doble puesto que el tema es algo que realmente me interesa y lo llevo algo adelantado con unos cursos virtuales que estoy haciendo, estoy seguro que le sacaría mucho más provecho que cualquiera de los asistentes...

Me rematan la noticia diciéndome que tengo que remplazar a mi compañero que se va para el seminario, eso significa retomar un puesto que dejé atrás con todo la alegría de mi ser, debo volver a atender a las personas, cosa que me amarga la existencia y me permite hacer ésta reflexión.

Lo positivo de la jornada es que como estoy tan desactualizado en todas las cosas que se han hecho con los sistemas me queda muy fácil negarme a colaborarle a la gente, deben entender que estoy de reserva y que ésta ya no es ni actividad principal, soy solo un apoyo ante la situación, nadie me preguntó si quería hacerlo y menos si podía hacerlo.

Lo negativo... mejor no hablar más al respecto, pero comento ésta joya: Ingeniero, es que no sé que le hicieron al horno microondas y no calienta... ¿Será que lo puede arreglar?

Como nota al margen me pregunto si Dios me hizo colombiano como castigo o solo de casualidad, no me refiere a la tierra como tal ni a la gente, ni la corrupción ni la insegurida, tiene que ver con el fútbol nacional; evidentemente tenía que hacerme hincha del rentado, de Santafé y de la Selección, una eterna agonía, un camino de decepciones... Ahí está el castigo.