lunes, junio 13, 2011

Del Exilio

Dice la Real Academia Española que el exilio es la separación de una persona de la tierra en que vive, generalmente por motivos políticos. Hay cientos de exiliados, muchos de ellos muy famosos, lo fue Neruda y no sé cuántos chilenos y argentinos, definitivamente se generan más exiliados durante las dictaduras, como también los hay compatriotas y por si fuera poco existen personas que lo hacen por voluntad propia en aras de conservar su vida.

Siempre me pareció algo bohemio, librepensadores que huyen simplemente porque no están de acuerdo con la realidad que les toca, algo triste porque el uso y el abuso del poder no resiste críticas; siempre se ha idealizado a los exiliados en el cine y uno no deja de sentir lástima y compasión por ellos.

Lo que nunca me imaginé es que me convertiría en uno de ellos, que sería la piedra en el zapato de alguien más, que sería lo suficiente molesto para otra persona y que ésta pudiera utilizar parte de su poder para exiliarme de su reino, y digo parte, no todo su poder, porque si lo hubiera utilizado todo me habría desaparecido del mapa, evidentemente no como en las dictaduras pero sí como para ponerme de patitas en la calle donde nunca existiera la posibilidad de volverlo a incomodar.

Me exiliaron por mis ideas políticas, por no quedarme callado ante lo que está mal, por no tratar de cubrir los errores de los demás, por cometer un error y responsabilizar a cada quien en la justa medida que le correspondía, por señalar lo obvio, por atentar contra el status quo, por ser cómo soy, mejor dicho, la definición me cayó como anillo al dedo, aunque eso no es consuelo.

Ahora muchas dudas surgen en mi cabeza, me imagino que los recién exiliados también se la hicieron, qué va a pasar conmigo? a dónde voy a ir a parar? qué tan largos pueden ser sus tentáculos? esto cómo me va a afectar? Muchas preguntas, ninguna respuesta, un ambiente enrarecido, mucho cuidado con los comentarios, muchas voces que se solidarizan pero desde la orilla, no se lanzan al vacío con uno, solo el tiempo lo dirá, solo un día sabré cuándo dejaré de ser un exiliado.

1 comentario:

Traductor dijo...

Es un tema bastante polémico, pero es una realidad actual a la cual no debemos negarnos ni cerrar las puertas!