De un Sueño Bizarro

En Notting Hill hablan sobre un cuadro de Chagall, Anna Scott, el personaje de Julia Roberts dice, más o menos, que así debería sentirse alguien cuando está enamorado, flotando a través de un cielo azul oscuro, entonces, Hugh Grant dice también debe haber una cabra tocando el violín a lo que ella afirma que la felicidad no es felicidad sin una cabra tocando el violín.

Todo esto viene al sueño bizarro de anoche, o mejor de ésta madrugada ya que me desperté antes de tiempo e intenté volver a dormir y por supuesto volver a soñar teniendo como resultado la siguiente secuencia.

Estaba en el patio de un hotel de mi pueblo, igualito a como lo recuerdo, con la piscina en la parte superior y luego una ladera con una edificación al fondo, junto a la piscina jugaban voleibol dos equipos, uno de ellos eran unas ancianas nudistas y entre ellas una muy parecida a una compañera de trabajo de mis padres, esto en el sueño me causó mucha impresión y me quedé mirándola fijamente a lo cual las personas me miraban sorprendidas por ser tan morboso.

Luego me acercaba al grupo con el que estaba, en una silla playera me senté junto a mi amiga que resultó ser nadie más ni nadie menos que Lexie Grey, la hermana de Meredith Grey de la serie gringa Grey´s Anatomy; estaba con unos pantaloncitos cortos y un escote bastante interesante que creo que no corresponde del todo a su físico.

Ahí nos llamaron para bajar al salón del fondo y otra mujer me detenía para mostrarme un tabaco que ella misma fabricaba y quería ofrecérselo a mi compañera que a estas alturas no sé bien quién era, el dichoso tabaco parecía café tostado y según recuerdo se mascaba y sabia hasta bien; ahí entramos al salón de banquetes y nos hicimos bien al final, junto a una especie de altar.

Todo va bien, la charla es amena y yo le pregunto a una mujer si se va a quedar conmigo toda la velada o prefiere quedarse con otro amigo que está conmigo y no sé quién es, o no lo recuerdo, ella, como las mujeres en la realidad, se queda como interpretando lo que le pregunté y yo le digo que más claro no puedo ser, al ver su duda la tomo de la mano y la llevo conmigo, ojalá fuera tan decidido en la vida real como en mis sueños.

Luego entran un grupo de niños vestidos de primera comunión, con sus velas y todo, cantan una canción que en el sueño parecía haberla escuchado antes y la cantaban mal a lo cual toda la gente reunía se reía y los corregía, el altar era un detalle especial ofrecido por la parroquia donde yo tomé ese sacramento...

En una mesa diagonal a la mía veo a dos señores pendientes de los niños, uno es un actor de televisión criolla y el otro alguien que conozco pero no logro identificar, éste personaje está borracho y cuando me doy cuenta golpea al niño con un vaso; luego llaman a los niños al centro y el de él levanta un pie mientras se arrodilla a lo cual el papá lo golpea con los pies, ahí me enfado y hago lo que nunca he hecho en mi vida: Salgo a reclamar.

El reclamo primero se lo hago al personal del hotel para que saque al individuo, luego a su compañero a lo cual me responde que el tipo acabó de enviudar y ahora tiene que participar en este evento, entonces resalto que su dolor lo único que va a conseguir es estropear un momento especial de su hijo.

Suficiente Chagall en veinte minutos, el sueño sigue intacto en mi memoria y sirve para un post, creo que todos tenemos sueños extraños pero éste no se si sirva para una interpretación.